De acuerdo al Gobierno, la Política Nacional de Migración y Extranjería (PNME, según sus siglas) “establece por primera vez en Chile una mirada explícita y de largo plazo sobre lo que queremos como Estado en relación a la migración”.
Durante esta jornada el Gobierno presentó la Política Nacional de Migración y Extranjería (PNME), que tiene como propósito mejorar la gestión de procesos migratorios en el país, poniendo foco en el control fronterizo, la regularización y la seguridad para el desarrollo del país. Además de las medidas concretas, implica la presentación de proyectos de ley por parte del Ejecutivo, para reformar e ingresar nuevas iniciativas en torno al tema.
La propuesta es resultado de un trabajo llevado a cabo tanto por diversos de actores del Estado como de la sociedad civil, organismos internacionales que promueven los Derechos Humanos, género, derechos de la niñez y adolescencia, y el sector privado.
La política contempla 10 ejes temáticos. De acuerdo al documento, la PNME “establece por primera vez en Chile una mirada explícita y de largo plazo sobre lo que queremos como Estado en relación a la migración, esta se funda en un enfoque responsable, asentado en los Derechos Humanos, con mecanismos eficaces para favorecer la inclusión de las personas que residen en nuestro país y decidido en las políticas de control de frontera”.
Por otra parte, cuatro ejes de la política contemplan implementación inmediata: empadronamiento biométrico, el Comité Interinstitucional para la materialización de expulsiones, desarrollo e implementación de Plan de fortalecimiento de capacidades locales y regionales; y el plan de fortalecimiento de la matrícula.
En la ceremonia estuvieron presentes autoridades como la ministra de Interior, Carolina Tohá, el subsecretario de la cartera, Manuel Monsalve, el canciller, Alberto van Klaveren, y al director del Servicio Nacional de Migraciones, Luis Eduardo Thayer.
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