El 59% de ellas se endeuda y hay 3 millones de niños, niñas y adolescentes que no reciben la cuota alimentaria que les corresponde por parte de los progenitores. Esta realidad acumula una deuda de 1.2 billón de pesos.
En la Argentina hay 3 millones de niños, niñas y adolescentes que no reciben la cuota alimentaria que les corresponde por parte de los progenitores. Esta realidad acumula una deuda de 1.2 billón de pesos, “equivalente a casi dos años de AUH, más de tres años de prestación alimentar”. Estas cifras revelan que 1.600.000 madres sufren violencia económica y hasta ignorancia de la Justicia durante gran parte de la crianza de sus hijos e hijas, provocando que en el 59% de estos hogares monomarentales (dirigidos por mujeres) destine más de la mitad o casi todos sus ingresos al pago de deudas o atrasos. Estos datos surgen del Ministerio de Economía que creó junto al Indec el Índice Crianza (IC) para medir el costo de bienes y servicios esenciales en el cuidado de niños, niñas y adolescentes.
Ante este escenario, desde la ultraderecha, la candidata a diputada nacional por La Libertad Avanza (LLA), Lilia Lemoine, en un intento de avanzar contra los derechos de las mujeres, propuso una ley para que los padres varones puedan “renunciar a la paternidad” y legitimar este flagelo, que ya sufren millones de mujeres y afecta a millones de infancias. “La mujer cuándo se entera del embarazo tiene 15 días para notificar al padre y este puede decidir si va a hacerse cargo del hijo o no”, explicó Lemoine sobre el proyecto que asegura presentará al llegar a la Cámara. “A mí no me parece justo que un hombre tenga que hacerse cargo económicamente de una criatura hasta los 18 años cuándo no lo quiso tener“, indicó la candidata.
La directora Nacional de Economía Igualdad y Género, Sol Prieto, en diálogo con El Destape, enfatizó que “en estos más de un millón seiscientos mil hogares monomarentales, donde viven más de tres millones de niños, niñas y adolescentes, lo cual equivale a casi 60 veces la cancha de Boca, llena de niños y niñas, a casi 40 veces la cancha de River, llena de niños y niñas, la vida es más difícil, porque tienen un ingreso promedio de la jefa del hogar monomarental, que es un 20% inferior al del resto de los hogares”. Por lo tanto, “tienen mayores niveles de pobreza, mayores niveles de indigencia”
Ante esto, detalló que “estas mujeres salen a trabajar con mucha más frecuencia que el resto de las mujeres y a menudo trabajan en empleos informales, que son por horas que les permiten unir o conciliar toda la carga que tienen de brindar el sustento al hogar y de cumplir con las tareas de cuidado”. En números reales, en Argentina les llevan aproximadamente seis horas y media de su vida.
En este marco, Prieto remarcó que la situación se complejiza aún más “cuando tienen dos niños, por ejemplo, y las tareas en el hogar les lleva más de diez horas”. Sostuvo que “en suma, la vida en los hogares monomarentales es más difícil y esto se debe a que justamente no solamente las tareas de cuidado están a cargo de la madre, sino que además son el único sostén económico del hoga
La funcionaria hizo referencia al informe del Unicef que revela que el 50,2% de los hogares en los que no vive el padre de los niños y niñas no recibió dinero en concepto de cuota alimentaria en los últimos seis meses, y el 12% sólo recibió cuota alimentaria algunos meses (informe de último semestre de 2022). “En tres de cada cinco de estos hogares la cuota alimentaria no se percibe en tiempo y forma, de acuerdo a datos de UNICEF”, aseguró.
Prieto explicó que para visibilizar estos datos se instruyó al INDEC para que elabore la canasta de crianza (que se puede acceder a través de la página del INDEC) justamente para que se constituya como valor de referencia para la planificación familiar, en especial en las parejas donde los progenitores se separaron o están en proceso de separación. “Desde que salió la primera estimación, contamos con 19 fallos en 10 provincias de nuestro país. Estamos capacitando a jueces y juezas de todo el país. La Corte de la Provincia sacó una acordada para capacitar a todos los jueces y juezas de la provincia de Buenos Aires en esta cuestión. Y además se está brindando en los centros de acceso a la justicia, patrocinio jurídico gratuito para las madres que se encuentran en esta situación, ya sea de mora o de ausencia total parental en términos económicos”.
Consultada por las declaraciones de la candidata de Milei, Prieto afirmó que, mientras se está trabajando para hacerle frente al no cumplimiento de las responsabilidades por parte de los progenitores con sus hijos, desde los sectores de ultraderecha buscan legitimarlos. “No parece muy adecuado ni necesario sacar una ley que legalice esta situación, más bien lo que tenemos que trabajar es que se garantice el cumplimiento, porque es una deuda que estos progenitores tienen no sólo con sus hijos, no sólo con las madres de sus hijos, sino con toda la sociedad“, remarcó.
“Si pensamos el total de la deuda alimentaria en nuestro país, correspondiente a este millón de progenitores que no pagan, nos estamos encontrando con una deuda de 1.2 billones de pesos, lo cual equivale a casi dos años de AUH, más de tres años de prestación alimentar, es decir, una deuda que no sólo la pagan las mamás sino que la pagan el conjunto de los contribuyente”, enfatizó.
A diferencia del argumento de la candidata de Milei, que justificó su proyecto afirmando que “las mujeres quedan embarazadas para retener a los hombres”, un estudio del CEPAL y Dirección Nacional de Economía, Igualdad y Género, 2023, también reveló que “el 59% de los hogares monomarentales destina más de la mitad o casi todos sus ingresos al pago de deudas o atrasos” y “el 73% de estos hogares usa el crédito para comprar comida o medicamentos”. Esto demuestra que, ante la falta de cumplimiento de la cuota alimentaria, las madres piden plata prestada y viven sobrendeudadas.
La cuota alimentaria es una suma de dinero obligatoria que los padres o madres que no conviven con sus hijos deben enviarle al padre o madre conviviente. La contraprestación no es sólo por alimentos sino que incluye los gastos de manutención, educación, esparcimiento, ropa, vivienda, salud, y el desarrollo de una profesión u oficio.
ElDestapeweb