Posted by La contienda electora no solo determinará la política estadounidense, sino que el resultado también impactará en otras divisas de potenciales mundiales, como el yen japonés.
La próxima elección en Estados Unidos determinará más que solo la política estadounidense, ya que su resultado también podría influir en el rendimiento del yen japonés, según indicó el Bank of America.
Aunque no sigue un patrón claro, los mandatos demócratas generalmente han llevado a la debilidad del yen frente al dólar, mientras que lo opuesto tiende a ocurrir bajo administraciones republicanas, señalaron analistas en un comunicado citado por la agencia Bloomberg.
“Si bien no está claro cómo afectará la próxima presidencia de EE. UU. al USD/JPY, el mercado puede comenzar a centrarse en posibles implicaciones con anticipación. Nuevamente, la primavera puede ser un momento clave para el USD/JPY con el Supermartes el 5 de marzo“, dijeron.
Desde que el demócrata Joe Biden se convirtió en presidente, el yen se ha depreciado un 40%, señaló el BofA, aunque esto se debe en gran parte a acciones fuera de la Casa Blanca.
La caída coincidió con el aumento agresivo de las tasas de interés de la Reserva Federal y la continua política monetaria laxa del Banco de Japón.
Sin embargo, los mercados globales de divisas están centrando su atención en la elección, y la volatilidad está aumentando entre monedas como el euro y el peso mexicano. El precio a un año está empezando a subir en comparación con vencimientos a más corto plazo en opciones de divisas.
Dólar vs. yen: cómo seguirá la disputa
En el caso del yen, esto ha llevado a un máximo de cuatro años en la diferencia entre la volatilidad de un año y nueve meses, según informó Bloomberg, citando datos de JPMorgan.
Y aunque se espera que el banco central de Japón cambie su política laxa, lo que impulsaría al yen, el BofA mantiene su pesimismo sobre la moneda.
Esto se debe a que históricamente sigue debilitándose después de una pausa de la Reserva Federal, incluso cuando el dólar cae. Un giro hacia la apreciación tiende a comenzar un trimestre antes del primer recorte de tasas.
Mientras el yen se ubica en 148 frente al dólar estadounidense, el banco proyecta que caerá a un nivel de 155 en el primer trimestre, antes de repuntar a 142 para fines de 2024.
Más allá de la elección, otros riesgos que alimentan la incertidumbre del yen incluirán cualquier cambio en el mercado laboral estadounidense y la manufactura global, el nivel de inversión extranjera directa en Japón y las políticas fiscales tanto de Tokio como de Washington, según el Bank of America.
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