Desde las elecciones generales, los precios futuros para la moneda estadounidense perdieron el 60% de su valor en apenas dos ruedas.
Los resultados de las elecciones 2023 cambiaron el panorama financiero para los principales inversores del país. El alejamiento, al menos parcial y/o temporal, de las ideas dolarizadoras del candidato Javier Milei -que algunos esperaban que gane, y en primera vuelta- provocó una ola de ventas en el mercado de divisas a futuro. Desde los comicios generales, los precios “a término” para el dólar pierden la mitad de su valor y la caída alcanza al 80 por ciento en algunos plazos si se los compara con los pico que registraron el 12 de octubre último, en plena corrida cambiaria impulsada por referentes de La Libertad Avanza.
En la media rueda de este martes, los plazos más negociados, como marzo y abril del año próximo, ceden hasta un 18 por ciento, que se suman al desplome de hasta 27,5 por ciento en los contratos pactados el lunes. Incluso, los segmentos más especulativos, como los contratos a un año (septiembre 2024) se pactan a la baja y reflejan una de devaluación que hasta hace días el “mercado” preveía para este 2023.
En la corrida que fue fogoneada por la oposición durante la semana previa a las elecciones generales los precios de los futuros se habían disparado, con valores que coqueteaban con los 2000 pesos a menos de un año, lo que coincidía con los cálculos de devaluación que hacía el mercado en caso de que ganara Milei, para poder dolarizar una economía sin dólares.
Los contratos de dólar futuro se pactan a un plazo determinado (un mes) entre dos partes y la ganancia o pérdida, de acuerdo con el resultado que tenga la divisa en la fecha determinada, se cancela en pesos. Para comprar un dólar futuro debe desembolsarse sólo un 20 por ciento de la posición y se determina por los movimientos que evidencia el precio oficial mayorista que informa diariamente el Banco Central.
Las corporaciones agropecuarias son quienes más utilizan ese tipo de herramientas. Un exportador que percibe sus ingresos en moneda extranjera, los cuales debe luego liquidar en el sistema financiero local, suele realizar venta de dólar futuro para asegurarse hoy sus ingresos en moneda doméstica. Es por esto que algunos pooles sojeros no pierden la calma a pesar de llevar varios días de inactividad. Cuando se decidan a bajarse de sus silos-bolsa, vendan su cosecha y reciban sus dólares, poco les va a importar la cotización, ya que la tienen pactada de antemano.
El derrape del dólar a futuro
En las últimas horas, el desarme de cobertura también se intensificó y le permitió al Banco Central intervenir (a un menor costo) para sostener la tendencia bajista. De acuerdo con los precios informados por el mercado de futuros Matba Rofex, los precios de este mes para contratos en bloque de mil dólares se clavaron en 350 pesos, mientras que para fin de noviembre los precios cerraron en 381 pesos, con una baja de 1,6 por ciento, mientras cae un 11 por ciento respecto de la previa a las generales.
La posición de noviembre había llegado a cotizar en 500 pesos en plena corrida de hace dos semanas, un valor que ahora se lo adjudican para el cierre de este año. Los contratos para fin de diciembre se sellaron en 555 pesos, con un retroceso este martes de 10,9 por ciento, mientras que acumula un desplome de 48 por ciento respecto de los valores pre comicios y de 70 por ciento contra el pico de hace un mes (944 pesos).
Para el año próximo, los contratos para el cierre de enero se realizaron este martes a 650 pesos, con un retroceso de 10 por ciento respecto al lunes, mientras que la caída respecto del viernes previo a las elecciones (990 pesos) escala a 53 por ciento y llega a una baja de 81 por ciento de hace un mes (1180 pesos). Para el cierre de febrero se negociaron contratos a 720 pesos, con una baja de 15,3 por ciento respecto del lunes y ese rojo asciende a 76 pesos si se lo compara con el viernes de la semana pasada.
Para el cierre de marzo los futuros se ofrecieron a 809 pesos la venta, con un retroceso de 15,6 por ciento, lo que sumado a la baja del lunes acumula una caída de 59,4 por ciento. Si se lo compara con el pico de 12 de octubre (1473 pesos) la pérdida de valor se ubica en el 82 por ciento. Para abril, los contratos se pactaron a 920 pesos, con una baja en la rueda de 17,9 por ciento, la cual alcanza al 62 por ciento desde el pico del 12 de octubre (1490 pesos). En el caso de mayo, los contratos se pactaron a 979 pesos, con una baja de 14,9 por ciento en la media rueda del martes y 52 por ciento respecto a la última rueda preelectoral. Respecto al pico del 12 de octubre (1678 pesos), la baja alcanza al 71 por ciento.
Para los contratos de junio, el Rofex informa un precio para la divisa estadounidense de 1100 pesos, con una baja diaria de 12,5 por ciento, mientras que si se lo compara con la rueda preelectoral se ubica en 39,1 por ciento y se amplía a 57,3 por ciento si se coteja con el precio en plena corrida del 12 de octubre (1730 pesos). En el caso de julio, el precio se ubica en 1130 pesos, con baja diaria de 12,7 por ciento, y de 58 por ciento respecto al 12 de octubre (1786 pesos).
En agosto los precios pactados para la divisa se hicieron a 1250 pesos, con una caída diaria de 16,7 por ciento, y 32 por ciento en comparación con el viernes pasado y 46,5 por ciento respecto del 12 de octubre. Septiembre, sin operaciones el martes, se mantiene con un precio de 1300 pesos.
Qué pasó el 12 de octubre
Todo comenzó el lunes 09 de octubre a las 10:30. En una entrevista radial, Milei, el candidato presidencial de LLA brindó un consejo a una persona que se le vence un plazo fijo en pesos: “Jamás en pesos, jamás. El peso es la moneda que emite el político argentino, por ende no puede valer ni excremento, porque esas basuras no sirven ni para abono”, planteó el libertario. A las 16:29, luego de la entrevista, y con el dólar en alza, Milei publicó este tweet atacando al “modelo económico que empobrece a los argentinos y solo beneficia a los políticos”, recuerdan desde la entidad que realizó el relevamiento. Para la noche del 9 de octubre ya se estaba hablando sobre la disparada del dólar y el rol de la entrevista de Milei.
El martes siguiente, entre las 10 y las 11, el dólar continuó su corrida y cuentas instigadoras/trolls y cuentas afiliadas a Milei comenzaron a criticar a la “casta” por la suba del dólar, defender los dichos de Milei y redoblaron su mensaje #chauplazofijo y #dolarización. En un lapso de poco más de una hora, los tuits de influencers relacionados con Milei habían logrado cosechar 7,7 millones de visualizaciones y 29.329 interacciones en contra del peso y a favor de la corrida.
Algunas de las publicaciones instando a no renovar los plazos fijos son de Juani Fernández (“Como vas a renovar un plazo fijo en Octubre de 2023 en Peronia! Es pregunta de psicotécnico a esta altura”), el Trumpista (“Acabo de sacar todos mis ahorros del banco. #ChauPlazoFijo Como en la cueva no me querían vender dólares, los terminé quemando”) o @usdtermo (“SAQUEN TODO Y COMPREN DOLARES O PASEN LOS PESOS A USDT, NO ESPEREN MÁS #ChauPlazoFijo”), entre otros.
Ese lunes el dólar blue abrió al alza en 895 pesos y cerró en 935 pesos. Al día siguiente la divisa superó los mil pesos, un techo sicológico que desestabilizó la paz cambiaria y requirió de diez días para poder desactivar la operación para generar una corrida contra el peso. Esta tendencia se trasladó a los mercados de dólar futuro, donde los precios se acercaron a los 2000 pesos.
Dos candidatos y dos precios
Los precios en el mercado a futuro estuvieron impulsados por las declaraciones de los distintos candidatos. A la bandera dolarizadora que sigue enarbolando Milei, que le pone un piso de devaluación hasta los 2000 pesos, se suman las declaraciones de quien iba a ser el ministro de Economía de la candidata por Juntos por el Cambio Patricia Bullrich, Carlos Melconian, quien sostenía que el lunes siguiente a las elecciones habría una devaluación que llevaría el precio de la divisa estadounidense a 500 pesos.
El secretario de Finanzas, Eduardo Setti, ratificó este miércoles que el tipo de cambio oficial se mantendrá fijo hasta el 15 de noviembre próximo, en base a lo acordado con el Fondo Monetario Internacional (FMI). En la misma línea, el secretario de Política Económica, Gabriel Rubinstein, aseguró que “el 23 de octubre el dólar oficial estará en 350 pesos” y señaló que a partir del 15 de noviembre se retomará el “crawling peg” con un ajuste gradual “de un 3 por ciento mensual”.
En su cuenta personal en Twitter, Rubinstein agregó que “ya todos se han percatado, en el país y en el exterior, que sin un monto de dólares significativo para controlar el financiero, la maxi devaluación no sirve”. Setti, a través de la misma red social, aseguró que “Melconian no leyó el acuerdo con el FMI que establece un tipo de cambio fijo hasta el 15 de noviembre. Una pena que, al igual que cuando tuvo conversaciones con el FMI, siga saboteando a través de la mentira”.
La especulación se basaba en lo sucedido el lunes post-PASO, que implementó antes de que abrieron los mercados, un salto del 21,8 por ciento en dólar oficial y en el mayorista, llevándolos a 365 y 350 pesos, respectivamente. Al mismo tiempo, estableció una suba del 21 por ciento en la tasa de política monetaria de las letras de liquidez para los bancos y los plazos fijos. Se trató, en ambos casos, y por lejos, de las mayores subas nominales de la actual gestión para una sola jornada. Los precios futuros para el billete verde están convalidando la posición y cotización que afirma el oficialismo.
ElDestapeweb