El Ministerio de Gobierno, Justicia y Derechos Humanos de la provincia, a través de la Secretaría de Mujeres, Géneros y Diversidad, revaloriza el objetivo del Programa Acompañar destinada a brindar asistencia a personas en situación de violencia de género. De igual manera repudia el mal uso de este programa, así como su estigmatización por ello.
Acompañar es una política pública y su objetivo principal es fortalecer la independencia económica de mujeres y LGBTI+ en situación de violencia de género. Consiste en un apoyo económico equivalente al Salario Mínimo, Vital y Móvil por 6 meses consecutivos a mujeres y LGBTI+ que se encuentran en situación de violencia de género; y el acompañamiento integral y acceso a dispositivos de fortalecimiento psicosocial para las personas incluidas en el programa, coordinado con los gobiernos provinciales y locales.
En nuestra provincia, el Sistema Integrado de Datos realizado a través del Plan Federal del Ministerio de Mujeres, Género y Diversidad por las personas cargadas en el Programa Acompañar registraron que las mujeres y diversidades sufren en primer lugar violencia física, seguida por violencia psíquica y luego violencia económica patrimonial, siguiendo la simbólica. En el caso de la modalidad, en el contexto en que se ejerce, la mayoría son dentro del ámbito doméstico, familiar, luego laboral e institucional.
Para avanzar en la prevención de estas situaciones es necesario el trabajo en red, como se viene haciendo con los diferentes dependencias del Estado provincial como Desarrollo Social, Salud, Seguridad Secretaría de Familia, y el Poder Judicial, que además garantizan el acceso a las políticas públicas y protege a las víctimas de violencia por motivos de géneros
El Programa Acompañar es totalmente autogestionable, es resultado de un trabajo serio, con una evaluación de riesgo y su acreditación es realizado por el Ministerio de Mujeres, Género y Diversidad de la Nación.
La secretaria de Mujeres, Géneros y Diversidad de la Provincia, Ivana Ibáñez, manifestó: “El programa acompañar permitió un antes y un después en la vida de las víctimas de violencias”.
En este sentido, resaltó: “Las personas que son víctimas de violencia por motivos de género suelen tener el componente de dependencia económica y es ahí donde el Estado tiene que ser el pilar fundamental para promover la autonomía de las personas que se encuentran en riesgo por situaciones de violencia”.
Asimismo, añadió que el trabajo es colectivo: “Es imperioso que podamos establecer acciones dispuestas a crear esas condiciones iniciales para la construcción de un proyecto de vida autónoma a través de estas asignaciones económicas” asegurando que, en este caso, el Programa Acompañar “acompaña a las personas a obtener ese proyecto de vida autónoma para que disminuya la condición de vulnerabilidad. “Las mujeres y diversidades no tienen las mismas condiciones socioeconómicas, estas brechas que se crean entre los géneros hacen que el colectivo LGBTy+ tengan un acceso más limitado a empleos remunerados, a empleos formales, sumados a un contexto de violencia por razones de géneros se les hace muy difícil poder salir de ese círculo si no tienen independencia económica”.